María Eugenia Baptista Zacarias: ¿Qué es la gastritis y cómo se debe tratar?
Gastritis es la inflamación de la mucosa gástrica, que en la gastroscopía se ve enrojecida, presentándose en forma de manchas rojizas, las cuales representan irritación o hemorragias subepiteliales. Sin embargo, el diagnóstico preciso se obtiene por exploración endoscópica.
Es una enfermedad que afecta el tracto gastrointestinal y en el que la mucosa gástrica se inflama, generando síntomas característicos como dolor de estómago, indigestión y eructos frecuentes,que surgen especialmente después de comer.
La gastritis puede ocurrir de repente (gastritis aguda) o presentarse lentamente con el tiempo (gastritis crónica). En algunos casos, la gastritis puede producir úlceras y un mayor riesgo de sufrir cáncer de estómago. No obstante, para la mayoría de las personas la gastritis no es grave y mejora rápidamente con el tratamiento.
Hay varios factores que pueden conducir al desarrollo de una inflamación en el revestimiento de la pared del estómago. Los más comunes incluyen:
Además de esto, las personas con enfermedades autoinmunes como el SIDA, también presentan un mayor riesgo de tener una gastritis.
Los ardores en el epigastrio suelen ceder a corto plazo con la ingesta de alimentos, sobre todo leche. Pero unas dos horas después de la ingesta los alimentos pasan al duodeno y el ácido clorhídrico secretado para la digestión queda en el estómago, lo que hace que se agudicen los síntomas.
También puede aparecer dolor abdominal en la parte superior (que puede empeorar al comer), indigestión o pérdida del apetito. En caso de que exista un componente ulceroso que sangre, pueden presentarse vómitos con sangre o con un material similar a manchas de café, y heces oscuras.
Es una enfermedad que afecta el tracto gastrointestinal y en el que la mucosa gástrica se inflama, generando síntomas característicos como dolor de estómago, indigestión y eructos frecuentes,que surgen especialmente después de comer.
La gastritis puede ocurrir de repente (gastritis aguda) o presentarse lentamente con el tiempo (gastritis crónica). En algunos casos, la gastritis puede producir úlceras y un mayor riesgo de sufrir cáncer de estómago. No obstante, para la mayoría de las personas la gastritis no es grave y mejora rápidamente con el tratamiento.
CAUSAS
La gastritis es una inflamación del revestimiento del estómago. La debilidad o las lesiones en la barrera mucosa que protege la pared del estómago permiten que los jugos digestivos dañen e inflamen el revestimiento del estómago. Varias enfermedades y afecciones pueden aumentar el riesgo de tener gastritis, entre ellas, la enfermedad de Crohn y la sarcoidosis, trastorno en el que crecen acumulaciones de células inflamatorias en el cuerpo.Hay varios factores que pueden conducir al desarrollo de una inflamación en el revestimiento de la pared del estómago. Los más comunes incluyen:
- Infección por pylori: es un tipo de bacteria que se fija en el estómago, causando inflamación y destrucción del revestimiento del estómago.
- Uso frecuente de antiinflamatorios como Ibuprofeno o Naproxeno: este tipo de medicamentos reducen una sustancia que ayuda a proteger las paredes del estómago del efecto irritante del ácido gástrico.
- Consumo excesivo de bebidas alcohólicas: el alcohol causa irritación de la pared del estómago y también deja el estómago desprotegido de la acción de los jugos gástricos
- Niveles elevados de estrés: el estrés altera el funcionamiento gástrico, facilitando la inflamación de la pared del estómago.
Además de esto, las personas con enfermedades autoinmunes como el SIDA, también presentan un mayor riesgo de tener una gastritis.
SÍNTOMAS
En ocasiones no se presentan síntomas, pero lo más habitual es que se produzca ardor o dolor en el epigastrio, acompañado de náuseas, mareos, vómitos, Entre otros. Es frecuente encontrar síntomas relacionados al reflujo gastroesofágico, como la acidez en el estómago.Los ardores en el epigastrio suelen ceder a corto plazo con la ingesta de alimentos, sobre todo leche. Pero unas dos horas después de la ingesta los alimentos pasan al duodeno y el ácido clorhídrico secretado para la digestión queda en el estómago, lo que hace que se agudicen los síntomas.
También puede aparecer dolor abdominal en la parte superior (que puede empeorar al comer), indigestión o pérdida del apetito. En caso de que exista un componente ulceroso que sangre, pueden presentarse vómitos con sangre o con un material similar a manchas de café, y heces oscuras.