María Eugenia Baptista Zacarias: Cómo cuidar de las rodillas, la articulación más grande del cuerpo
Una de las más importantes articulaciones del cuerpo son las rodillas y son las que más padecen por el paso del tiempo y el peso corporal. El sobre peso y la edad son los que intervienen en el dolor de rodillas, sin embargo, hay personas jóvenes y delgadas que pueden padecer incomodidades, ya que tienen muy poca masa muscular que la rodea y la protege.
Las rodillas permiten permiten que las piernas puedan flexionarse y volver a su posición original , por lo que si alguno de sus elementos se daña puede causar dolor, así que se puede padecer de problemas al caminar, correr, subir o bajar escaleras, agacharse o hacer cualquier movimiento que implique su uso.
Si las rodillas duelen es momento de preocuparse, pues puede que no se trate del músculo ni del hueso, sino las articulaciones que conectan los huesos a la rótula. De esta manera el cuerpo está mandando un mensaje inequívoco de que hay que hacer algo.
Los trastornos que afectan a esta articulación van desde la artrosis o artritis que pueden padecer personas de edad avanzada, hasta las lesiones causadas por el ejercicio como las de menisco y ligamentos cruzados pasando por un rango intermedio en las que se hallan las causadas por el desgaste de la cara posterior de la rótula.
Para aliviar estos dolores, se recomiendan los ejercicios isométricos que consisten en contraer los músculos sin estar en movimiento. Este ejercicio se puede realizar mientras se está sentado en el sofá o en la cama. Se extiende la pierna cada vez y se aplica tensión en ella, como si se tratara de marcar los músculos.
Otro ejercicio que se puede realizar es mantener el equilibrio mientras se está sobre un solo pie. Se recomienda que se haga en una superficie inestable como una sábana o una alfombra de goma espuma.
Las rodillas permiten permiten que las piernas puedan flexionarse y volver a su posición original , por lo que si alguno de sus elementos se daña puede causar dolor, así que se puede padecer de problemas al caminar, correr, subir o bajar escaleras, agacharse o hacer cualquier movimiento que implique su uso.
Si las rodillas duelen es momento de preocuparse, pues puede que no se trate del músculo ni del hueso, sino las articulaciones que conectan los huesos a la rótula. De esta manera el cuerpo está mandando un mensaje inequívoco de que hay que hacer algo.
Los trastornos que afectan a esta articulación van desde la artrosis o artritis que pueden padecer personas de edad avanzada, hasta las lesiones causadas por el ejercicio como las de menisco y ligamentos cruzados pasando por un rango intermedio en las que se hallan las causadas por el desgaste de la cara posterior de la rótula.
Para aliviar estos dolores, se recomiendan los ejercicios isométricos que consisten en contraer los músculos sin estar en movimiento. Este ejercicio se puede realizar mientras se está sentado en el sofá o en la cama. Se extiende la pierna cada vez y se aplica tensión en ella, como si se tratara de marcar los músculos.
Otro ejercicio que se puede realizar es mantener el equilibrio mientras se está sobre un solo pie. Se recomienda que se haga en una superficie inestable como una sábana o una alfombra de goma espuma.
También, se pueden tomar suplementos a base de colágeno o ácido hialurónico con magnesio y /o vitamina C. Además de ayudar a la salud de las articulaciones, estos suplementos fortalecen el cabello y las uñas y embellece la piel.