María Eugenia Baptista Zacarías: ¿Cómo preparar aceite de caléndula en casa?
El aceite
de caléndula es ampliamente conocido en la medicina alternativa como
remedio para tratar diversas afecciones en nuestro cuerpo, especialmente las
relacionadas con la piel.
La caléndula, de nombre científico calendula officinalis, es una planta que
se caracteriza por poseer cualidades antisépticas, antiinflamatorias,
cicatrizantes y calmantes.
Su aceite se obtiene al infundir las flores de
la planta, ricas en sustancias saludables como glucósidos y carotenoides, en un
aceite portador. Dicho producto suele añadirse en ungüentos, cremas y otra
variedad de productos tópicos.
Entre los principales usos y beneficios del aceite de caléndula destacan:
- Protección solar: Este derivado de la caléndula destaca por su capacidad para proteger la piel ante los efectos de la radiación solar. Especialmente, se recomienda utilizar como un complemento para potenciar los efectos del protector solar convencional que usamos contra los rayos ultravioletas.
- Curar heridas: El aceite de caléndula es utilizado como aliado para acelerar la cicatrización de heridas superficiales, debido a que sus propiedades antisépticas y antiinflamatorias contribuyen a un mejor proceso de curación de estas lesiones. Además, algunos estudios han demostrado sus efectos positivos en la disminución del enrojecimiento, hinchazón y hematomas.
- Ayuda a combatir el acné: Esto se debe a sus cualidades antisépticas, que favorecen la limpieza de los poros y disminuyen la presencia de bacterias asociadas al acné. Asimismo, contribuye a reducir los comedones, gracias a sus efectos antiinflamatorios.
¿Cómo
preparar aceite de caléndula casero?
Si bien el aceite de caléndula está disponible
en farmacias y tiendas cosméticas, es posible elaborar el aceite de forma
casera en muy pocos pasos.
Lo que necesitas es un aceite portador, como el
de jojoba –también puedes usar de oliva, coco o almendras- y los pétalos de
esta planta. A continuación, te explico el paso a paso para prepararlo. Toma
nota:
Materiales
o ingredientes:
- 150
gramos de pétalos de caléndula secos.
- 200
mililitros de aceite de jojoba.
- Frasco
de vidrio esterilizado con tapa hermética.
Preparación
1.
Llena
el frasco hasta la mitad con los pétalos de caléndula.
2.
Vierte
el aceite sobre los pétalos hasta que el frasco quede casi lleno.
3.
Tapa
muy bien y coloca el frasco en un espacio cálido durante un mes. Procura que
sea un lugar donde le dé el sol.
4.
De
vez en cuando, agita el frasco para redistribuir su contenido.
5.
Una
vez cumplido el mes, cuela el aceite y envásalo en un frasco limpio.
6.
El
producto final lo puedes almacenar en cualquier ambiente seco y fresco.
Frota unas gotas de este derivado de la
caléndula sobre tu piel para hidratar. En caso de acné, puedes aplicar el
aceite sobre las lesiones y dejar que actúe sin enjuagar.
Con información de Mejor con Salud
Fotos cortesía de Semana, Bol de Cereales y Hogarmania
